lunes, 28 de septiembre de 2009

DIARIO DE GUERRA. Entrada 024. Ni libertad, ni democracia, vivimos engañados. Segunda parte: Partitocracia. Seguimos con las entradas referentes a explicaros, a vosotros, españoles, lo engañados que estáis al creer que vivís en una Democracia y que participáis de ella, que vuestros votos son importantes y que los políticos, esos cafres que llevan a la ruina social, económica, moral y territorial a España, os tienen en cuenta a la hora de hacer sus planes. Desde la Nave Mundo, a pesar de que todavía no ha llegado nuestra hora, os animamos a que abráis los ojos, a que os involucréis en una revolución social que conduzca a desalojar del poder a esos chupasangres, a esos miserables que solo piensan en satisfacer sus ambiciones personales sin importarles lo que puedan destruir a cambio, ya sea el país o tu vida.

Tened en cuenta que si no sois vosotros los que hagáis esa revolución, nadie la hará, porque a nadie importáis excepto a vosotros mismos. Dejad de mirad el televisor, de engordar las barrigas y de drogaros con el opio que tan alegremente distribuyen los políticos para teneros envilecidos y dóciles como borreguitos. ¡Despertad! Porque no sois libres, no vivís en Democracia. Vivís en una tiranía, en algo peor que una dictadura, porque al menos con la dictadura sabes a que atenerte y no te engañan. En España vivimos en una Partitocracia.

Lo primero que hay que saber es que un partido político, cuando se encuentra en la oposición, lo primero que piensa es: “¿Cómo desgasto al actual Gobierno y, lo más importante, cómo llego al poder?”. Y cuando un partido esta en el poder, lo único en lo que piensa es: “¿Cómo me mantengo en el poder?”. En esta ecuación, ¿dónde entra el pueblo? En ninguna parte, pues como decían con cinismo los antiguos senadores romanos de la Republica: “todo para el pueblo, pero sin el pueblo.”

El sistema en España esta diseñado para que los partidos políticos actúen impunemente y sin que sus acciones, errores y actuaciones criminales puedan ser castigados. Tanto es así, que a pesar de que ha habido terrorismo de estado, corrupción, manipulación de los medios, manipulación y falsedad de documentos oficiales, engaño y ocultamiento de información al pueblo, atentados, fallos en la seguridad nacional, estafas, prevaricación y muchos más delitos, prácticamente casi todos los políticos han salido de rositas de estas imputaciones sin ni siquiera pasar por un juicio, y se pueden contar con los dedos de una mano los políticos que han dimitido o pagado por sus errores o crímenes.

Ya con las múltiples divisiones territoriales nos encontramos con que el sistema esta pensado para que un simple alcalde tenga, en ocasiones, más poder que el Gobierno, de ahí que tanto las localidades, como las comunidades, sin excepción alguna, estén salpicadas de casos de corrupción, prevaricación y estafas con dinero público que prácticamente quedan sin castigo. Pero no nos centremos en esto porque entonces no podemos explicar porque el español esta inmerso en una Partitocracia en la que no tiene poder alguno.

Analiza, oh, tu, culo gordo, cuando vas a votar con que te encuentras. Tienes ante ti una papeleta con un señor, ya puede ser el mentiroso y déspota ZP, o el inefable que para todo tiene solución señor Rajoy, y podrás darte cuenta de que ahí empieza la tiranía de la Partitocracia. ¿Quién ha elegido a ese señor para que represente a los votantes de ese partido y luche para llegar a la presidencia del Estado? ¿Lo han elegido los ciudadanos entre otros candidatos como ocurre en otros países? ¿Has ido a votar a la delegación de tu partido elegido para elegir a ese candidato? La respuesta a estas preguntas es un rotundo NO. A ese candidato lo han elegido, sin contar para nada con el pueblo, el mismo partido que se presenta a las elecciones generales, dentro de una elecciones internas en las que el partido ha presentado dos o tres candidatos elegidos por ellos mismos sin que la ciudadanía tenga ni la más mínima información sobre el proceso de selección y sin que pueda hacer absolutamente nada para elegir a quien más le convenga. Es decir, los candidatos a la presidencia son elegidos a conveniencia de los políticos, no del pueblo. Esto no es un ejemplo de soberanía popular ni de Democracia.

Sigue analizando la papeleta, si es que entiendes lo que lees, dado que tu cerebro se encuentra atrofiado por el alcohol, el fútbol y los programas de corazón, que nadie ve pero que baten record de audiencia. Veras que debajo del candidato principal hay una larga, larga, lista con otros nombres: el resto de candidatos a ministerios y sillas de diputados. ¿Pero quienes son esos mendas y de donde han salido? Pero lo más divertido es que no puedes hacer nada al respecto, porque es imposible no votarlos si ya has decidido votar al candidato número uno. Es decir, que cuando votas al candidato a Presidente, candidato que no has elegido, votas, por que te obligan, no tienes elección, a veinte, treinta o cuarenta señores y señoras que tampoco has elegido, que no conoces, que no sabes cuales son sus méritos y que van a ocupar un escaño costeado con el dinero público; con tu dinero. Esto no es un ejemplo de soberanía popular ni de Democracia.

Los políticos, en las campañas electorales, sean cuales sean, prometen, prometen y prometen, y luego cuando están en el poder, dichas promesas no se cumplen. Existe una estadística muy graciosa que dice que el 90% de las promesas electorales no se cumplen o se incumplen cuando el político no lleva ni un año en el poder. ¿A quién reclamas cuando un señor que se ha comprometido en directo por la televisión, la radio y el periódico a todo el país a cumplir determinadas promesas que luego no cumple? ¿Al partido de ese político? Pues ese político sigue ahí sin que nadie le pueda tocar ni enjuiciar por falsas promesas, mentir, manipular o incumplir promesas electorales. En los programas del corazón y en la tele-basura estamos más que hartos de juicios y escándalos por mentiras mucho menos importantes. ¿Esto es Democracia?

Cuando el político esta en el poder, hace y deshace a su antojo sin contar para nada con la opinión pública o con las necesidades del pueblo. ¿Cuándo un político en España, del partido que sea, ha realizado consultas con el pueblo cuando efectúa sus políticas? Según el término universal de Democracia, el líder o presidente de la nación debe realizar consultas con el pueblo antes de efectuar cambios o políticas. En España no ocurre nada de esto, como en la mayoría de los países, sino que los cuatro años que dura el mandato del presidente, este no cuenta para nada con nadie, ejerciendo una verdadera dictadura, algo que los griegos de la Antigüedad combatían por considerarlo despotismo.

En los cuatro años que un político ejerce el poder, no contamos para él, no somos nada excepto una fuente de dinero a exprimir. Después de mentir en la campaña electoral, no cumple sus promesas y durante su periodo de mandato realiza políticas que nada tenía que ver con lo que había prometido durante la campaña. En esos cuatro años, tu, y yo, y el resto, solo somos meros espectadores sin ningún tipo de poder para cambiar la situación, por más que nos guste engañarnos pensando que con manifestarnos solucionamos algo. Una mentira más, porque nunca en España una manifestación ha conseguido algo. Quien diga lo contrario, miente, o esta equivocado.

Leyendo hasta aquí, te darás cuenta de que los políticos solo quieren dos cosas de ti: tu voto, y tu dinero a través de los impuestos. Pero incluso en eso nos engañan, estafan y aprietan el rodillo de la Partitocracia. Votas a un determinado partido político y no gana, pero, albricias, como el partido oponente no ha sacado “mayoría absoluta”, el partido que no gana pacta con otro que NO has votado y al que NO darías tu voto y, magia, ganan las elecciones. Es decir, tu partido gana, pero a costa de un fraude, porque si tu no has votado al otro partido, el minoritario, por algo será. Y peor es cuando compruebas que ese pequeño partido, para dar el apoyo a tu partido, pide realizar políticas que tu nunca votarías. ¿A quién reclamas entonces? ¿A tu partido, a ese partido que te ha mentido, ninguneado y engañado?

Y en cuanto al asunto de los impuestos, ¿acaso el partido que has votado te ha pedido permiso para entregar tu dinero a televisiones y periódicos comprados, a actores y cantantes de medio pelo sectarios, a financiar políticas separatistas o fascistas, a gastarlo en coches de lujo, viajes a todo tren y sueldos astronómicos? Entonces, ¿qué pintamos realmente en esta llamada “Democracia”? ¿Crees que eres libre solo porque votas cada cuatro años? ¿Y durante esos cuatro años, en que participas en la vida política? Solo te dejan hacer una cosa: manifestarte, un engaña bobos, cuanto que no sirve de nada, excepto para ir de un lado a otro como borregos sabiamente conducidos por el pastor, el señor del sillón presidencial.

Analiza seriamente como toman leyes, hacen decisiones y te darás cuenta de que en este juego llamado “Democracia” el pueblo no tiene control ni poder sobre los políticos, que han entretejido hábilmente una red llamada Partitocracia en la que se comportan como dioses déspotas y caprichosos. No pintamos nada, no hacemos nada y no podemos participar en el devenir de los acontecimientos porque nos han quitado el poder, el poder soberano. Nos tienen engañados, nos hacen creer que somos libres, nos drogan y nos manipulan con sus televisiones y periódicos comprados. Allá tu si crees que eres libre. Yo lucharé contra la Partitocracia, porque soy un guerrero, porque creo en la Libertad, en la Democracia, en la verdadera Democracia, no en esta Partitocracia. Continuará… Fin de la entrada. LOBO.